jueves, 31 de diciembre de 2015

Así comencemos el 2016

Cada inicio de año nos planteamos muchas cosas, nos da temor no saber qué va a ocurrir, no sabemos cómo alcanzaremos todos estos proyectos y por sobre todo no sabemos con la ayuda de quien.

Creo que es una buena forma de comenzar el año, pensar en estas tres cosas fundamentales en la vida de todo aquel que se acerca a Dios.

Génesis 26:3  Habita como forastero en esta tierra, y estaré contigo, y te bendeciré; …

1-      Somos forasteros, aunque vivimos en este mundo nuestra ciudadanía está en el cielo y debemos vivir como forasteros, sólo estamos de paso; no comprometernos con las cosas de este mundo. Debemos considerar que nuestro paso por la vida es sólo momentáneo y nos espera algo mucho mejor en nuestra patria celestial.
2-     Dios está con nosotros, es su compromiso personal, Él asume esta responsabilidad y todos los beneficios que conlleva. Dios está a nuestro lado, Él va con nosotros y no se separa en ningún momento, nos guía y nos protege; y eso nos da seguridad.
3-     Su bendición, es imposible pensar en estar caminando con Dios y no tener su bendición, el mismo hecho de que estemos en su presencia ya es una gran bendición. Disfrutaremos de sus bendiciones al estar a su lado. Dios transforma nuestra vida y nuestro entorno y todo lo que nos pueda ocurrir de ahí en más será de gran bendición para tu vida.

Comencemos este año así, teniendo presente cómo vamos a transitar por él, solos o con la presencia y bendición de Dios en nuestra vida. 

martes, 29 de diciembre de 2015

¿Duermes?

Yo he podido experimentar esto de llegar tan cansado y desplomarme en la cama y dormir totalmente agotado por un día lleno de trabajo y aunque no tenía mucho dinero tenía la satisfacción de haber trabajado. Y no me refiero al trabajo tras un monitor, sino a pintar las paredes de una escuela o limpiar un terreno y cortar el pastor por horas bajo el sol; un verano tuve que limpiar una piscina todos los días desde las 6 de la mañana hasta las 10, terminé más moreno de lo que soy normalmente. Así que esas horas de descanso bien merecidas son realmente dulces.

Eclesiastes 5:12  Dulce es el sueño del trabajador, coma mucho, coma poco; pero al rico no le deja dormir la abundancia.

Pero triste es la vida del que sólo se pasa afligido por lo que tiene o quiere y por el miedo a perder lo que tiene. Algunos tienen tanto que no pueden descansar porque las preocupaciones no les dejan. Luchan tanto por alcanzar sus ambiciones que después no pueden disfrutarlas porque ahora viven para ellas. Conocí a un hombre que planificación su retiro de vejes, pero tras cambios en el sistema de gobierno de su país, toda esa estrategia de vida, se perdió y ahora pagaba tantos impuestos por sus vienes que sólo podía tener dos opciones: o vendía lo que tenía, o trabajaba para poder pagar los impuestos y no se desprendía de lo que por años logró alcanzar. Realmente es frustrante para mí pensar en esto. 

Dios quiere darte una vida abundante, pero esto no habla de riquezas materiales sino de momentos ricos y llenos de gozo. Trata de que tu día tenga un espacio para cada cosa importante; el trabajo debe proveer lo necesario para que puedas disfrutar de tu familia y de los amigos; disfrutar un café, de una caminata; de una buena película en el cine o una tarde de juego con amigos o familia.


¿Cuánto tiempo dedicas a tu trabajo?, ¿Duermes?, ¿El trabajo te absorbe o es la herramienta para alcanzar el bienestar familiar?. Mira bien cómo inviertes tu tiempo y cómo eres ante el deseo de tener bienes materiales. Dios te quiere dar lo mejor, disfruta de lo que te da.

jueves, 10 de diciembre de 2015

¿Ya te cansaste?

Quiero comenzar haciendo una pregunta: ¿te cansaste alguna vez de perseguir un sueño?, vamos, seamos sinceros; a todos nos ha pasado que nos vemos a mitad del camino, en medio de la nada preguntándonos ¿cómo diablos llegamos a este punto?.


Probablemente al igual que yo, sentiste alguna vez que lo que comenzaste como la carrera de tu vida para alcanzar ese sueño se fue desvaneciendo y quizás ni siquiera por tu culpa sino porque otros, los que eran parte de ese sueño o esperanza, decidieron cambiar de rumbo y ahora te ves con las manos en las rodillas, inclinado hacia el frente y preguntándote: “¿Qué hago ahora?”. Si te sirve de consuelo, creo que no hay una respuesta para eso. Sí, no la hay, porque eres tú el que tiene que ingeniarse cómo seguir o hacia a dónde ir. No dejes que otros tomen la decisión por ti, es tu sueño, tu carrera, tus decisiones.

Quizás sientas la tentación de dejar todo a un lado y volver, quizás decidas sentarte al costado del camino y no moverte más, o tal vez decidas que es momento de continuar una milla más. Soy del tipo de personas que siempre pienso que rendirse no es una opción en la vida, que posiblemente eso que sueñas está un peldaño más arriba nada más, a unos pocos pasos de ti, y si decides dejar todo porque simplemente no entiendes lo que pasa en este momento; puedes perderlo todo.


Quiero animarte a que no dejes de correr, no te rindas así porque sí. Si no quieres o no sabes a dónde avanzar, sólo detente un momento, toma un respiro, siéntate en el borde del asfalto; puedes mirar el paisaje si deseas, y continúa. Los que triunfan en la vida no siempre son las mentes más brillantes, sino las cabezas más duras, aquellos que persisten cuando todos se rindieron. Estírate a un poco más, esfuérzate para que todo esto valga la pena. Dios te dará las fuerzas.

viernes, 20 de noviembre de 2015

El trigo, tú

“Los campos de trigo no me recuerdan nada y eso me pone triste. ¡Pero tú tienes los cabellos dorados y será algo maravilloso cuando me domestiques! El trigo, que es dorado también, será un recuerdo de ti. Y amaré el ruido del viento en el trigo.

Este fragmento es del libro "El Principito", es la conversación entre el zorro y el Principito. Uno de los capítulos más emotivo y significativo. Donde se revela el secreto de que “lo esencial es invisible a los ojos”.

¿Qué cosas te transportan a lugares, momentos y personas?, ¿un parque, unas hojas secas en la vereda, un perfume, algún color o hasta un número en particular?, puede ser que ciertas letras te hagan recordar que no son sólo letras o cosas sino que encierran la  magia del amor y el recuerdo grato de una persona que aunque hoy está lejos la tienes presente.

El trigo puede ser inútil, pero cuando te recuerda a alguien es lo más hermoso que puedes tener. Es hermoso poder guardar estos íconos en tu mente, son parte de tu vida; hacen que soñar sea posible. 

No pierdas la capacidad de soñar e ilusionarte, esto se consigue gracias a las relaciones, gracias a ser “domesticados” por alguien.


¿Quién guarda tu corazón?, o mejor dicho ¿a quién guardas en él?, la vida es muy corta para no recoger pequeños granos de trigos en el camino. Ama, sueña, sonríe al pensar en esto; no dejes de sentir. Estos sentimientos te recuerdan que eres un ser humano, un reflejo de Dios.

martes, 17 de noviembre de 2015

Respeto y justicia

Suele ser muy difícil encontrar el equilibrio entre el respeto y la justicia, porque cuando reclaman justicia, algunos, pierden el respeto. Las protestas populares contra el gobierno de turno o los que están en autoridad traen por lo general agresión y violencia.

La pregunta es: ¿podemos pedir justicia sin faltar el respeto?

Creo que para actuar con respeto y justicia tenemos que comprender bien nuestra situación, posición y rol; quiénes somos y qué estamos haciendo. Entender nuestra función y ejecutarla correctamente. Cuando actuamos en el campo y posición que nos corresponde si pasar la línea podemos actuar con justicia y respeto.

En la Biblia hay varios ejemplos: José ante Potifar y Faraón. Daniel ante el rey Darío. Los amigos de Daniel ante el rey Nabucodonosor.

Dan 3:10  Tú, oh rey, has dado una ley que todo hombre, al oír el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, se postre y adore la estatua de oro;
11  y el que no se postre y adore, sea echado dentro de un horno de fuego ardiendo.
12  Hay unos varones judíos, los cuales pusiste sobre los negocios de la provincia de Babilonia: Sadrac, Mesac y Abed-nego; estos varones, oh rey, no te han respetado; no adoran tus dioses, ni adoran la estatua de oro que has levantado.
13  Entonces Nabucodonosor dijo con ira y con enojo que trajesen a Sadrac, Mesac y Abed-nego. Al instante fueron traídos estos varones delante del rey.
14  Habló Nabucodonosor y les dijo: ¿Es verdad, Sadrac, Mesac y Abed-nego, que vosotros no honráis a mi dios, ni adoráis la estatua de oro que he levantado?
15  Ahora, pues, ¿estáis dispuestos para que al oír el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, os postréis y adoréis la estatua que he hecho? Porque si no la adorareis, en la misma hora seréis echados en medio de un horno de fuego ardiendo; ¿y qué dios será aquel que os libre de mis manos?
16  Sadrac, Mesac y Abed-nego respondieron al rey Nabucodonosor, diciendo: No es necesario que te respondamos sobre este asunto.
17  He aquí nuestro Dios a quien servimos puede librarnos del horno de fuego ardiendo; y de tu mano, oh rey, nos librará.
18  Y si no, sepas, oh rey, que no serviremos a tus dioses, ni tampoco adoraremos la estatua que has levantado.

Estos jóvenes no faltaron el respeto al rey, no le dijeron: “tú estás loco, nos sabes lo que nos pides”. No criticaron su edicto, no blasfemaron contra la fe del rey. Se sometieron a la ley y justicia del rey, aceptaron su castigo; pero no iban a romper sus principios, sólo que ellos iban a vivir para Dios. Ellos se sometieron a la autoridad aunque no estuvieron de acuerdo con la ley, ellos cumplieron con la pena de la ley, no se escaparon ni sobornaron a nadie para ser librados. Pero no iban a dejar a su Dios, aun cuando sus vidas dependan de esto; por eso dijeron: “no es necesario hablar de esto”.


La justicia y respeto se ve en la forma que nos dirigimos a nuestros compañeros y superiores, lo que decimos de ellos delante y detrás de ellos. La justicia es actuar conforme a los principios de Dios y el respeto, actuar como Dios con nosotros.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Nuestros propios demonios

“Un hombre famoso dijo una vez: nosotros creamos a nuestros propios demonios. ¿Quién lo dijo?, ¿eso qué significa?. No importa, yo lo dije porque él lo dijo… y bueno, él era famoso, así que ahora ya lo dijeron dos personas célebres…”.

Así comienza su relato Tony Stark en la película Iron Man 3. La frase aparentemente es de Mark Twain, el escritor de Tom Sawyer. Quien también escribió otras frases interesantes; pero ésta, en particular, refleja una gran verdad a cerca de nuestras decisiones.

A cada paso en la vida, con cada intervención en este drama de vivir, con cada interacción con los que nos rodean, tenemos el potencial de construir o destruir. Somos capaces de crear nuestros propios demonios, aquellos que nos van a atormentar el resto de nuestras vidas, porque tendremos que vivir con esas decisiones pesando en nuestros hombros.

Abraham vivió eso, descendió a Egipto, mintió y al salir de allí llevo consigo a una sierva, con quien luego tendría un hijo, Ismael, que hasta hoy es un dolor de cabeza para el pueblo de Dios. Todo Israel mismo tuvo que aprender esta lección, cuando no echaron de sus tierras a los moradores de Canaán y ellos vinieron a ser un tropiezo constante. ¿Cómo comenzó?, se sintieron fuertes y luego vino esto:

Josué 23:13  sabed que Jehová vuestro Dios no arrojará más a estas naciones delante de vosotros,  sino que os serán por lazo,  por tropiezo,  por azote para vuestros costados y por espinas para vuestros ojos,  hasta que perezcáis de esta buena tierra que Jehová vuestro Dios os ha dado.

Lastimosamente nuestras decisiones nos llevan a sufrir muchas veces las consecuencias de ellas y los efectos colaterales los recibimos a largo plazo. A veces no nos damos cuenta de cuán profundo es el hoyo que cavamos, porque parece que nunca acabamos de caer.

Tony Stark concluye su relato diciendo: “Empiezas con algo puro, algo emocionante; luego… vienen los errores, los compromisos. Creamos nuestros propios demonios”.


Pero, ¿este debe ser el epílogo de un hijo de Dios?, definitivamente no. Podemos trazar una historia diferente, tomar decisiones que nos conduzcan a bendiciones enormes y un futuro esplendido. Dios está con nosotros, su Espíritu Santo en nosotros, nos puede guiar y llevar hacia el mejor lugar. Él puede ayudarte a tomar las mejores decisiones y vivirás en paz. 

sábado, 14 de noviembre de 2015

Amor Comprometido

Las relaciones no se basan simplemente en el emocionalismo o la fantasía de los sentimientos, que aclaro, no están mal; pues debes sentir amor y apasionarte. Pero lo que mantiene y sostiene al amor es el compromiso, la decisión de permanecer y dar todo por la otra persona, obra o causa.

Hay personas que son auditivas y necesitan escuchar la frase “te amo” constantemente y así se sienten amadas. Otras son visuales y necesitan ver acciones que demuestren amor, para ellos no les sirven las palabras. Y otras son mixtas, necesitan ambas cosas; pero cualquiera sea el caso, siempre se necesita compromiso para hacer que el amor permanezca.

En un desayuno continental, que incluye huevos revueltos y tocino; una gallina participa y un cerdo se compromete. La gallina participa dando un huevo, hace su parte, da algo de sí; en cambio el cerdo se compromete, pone su vida, tiene que dar el tocino, da todo para que un desayuno se pueda disfrutar.

Si amas a alguien debes comprometerte y dar todo de ti. Si amas la obra de Cristo y su causa también, debes comprometerte con lo que dices que eres. Por eso dice la Biblia:

Romanos 10:9  que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.

El punto aquí, es que tu boca esté de acuerdo con tu corazón y tus pensamientos, no puedes decir: “yo amo” pero tus acciones muestran lo contrario y no puedes actuar sólo por impulso sin tener un amor real en tu corazón.


Ya sea que ames a alguien, la obra de Dios o a Cristo mismo, comprométete y demuéstralo con palabras y acciones. 

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Podría ser mejor

El descontento es más común de lo que te puedes imaginar. Cada día en diferentes ámbitos nos encontramos haciendo reparos o quejándonos de la situación, no nos gusta nuestro corte de cabello o estos gramos de más. Usamos la típica frase: “estaba bien, pero pudo estar mejor”.


Realmente es difícil luchar con el descontento porque es parte inherente del hombre. El descontento puede servir para algo, para no conformarnos con lo actual y buscar nuevas fronteras o innovar en nuevos emprendimientos. El descontento te impulsa a salir del molde. Pero también es un problema, las personas que no encuentran nada bueno en lo que tienen o en los que están a su alrededor reflejan no sólo una desaprobación de eso, sino que demuestran que se sienten insatisfechos consigo mismo y con Dios. ¿Por qué Dios?, porque es Él quien da todas las cosas y tiene un propósito en cada una de ellas. Si no acepto lo que Dios me da, en cierto modo rechazo su plan para mí, rechazo a Dios y Él sabe que es lo mejor para mí.

1Timoteo 6:6  Es cierto que con la verdadera religión se obtienen grandes ganancias, pero sólo si uno está satisfecho con lo que tiene.

Dios puede traer muchas bendiciones a tu vida, en muchos aspectos de ella; pero si no aprendes a contentarte con lo que tienes, de nada servirá, te volverás un ingrato y menospreciarás las bendiciones de Dios.

A lo práctico:
1-      Mira lo que tienes y evalúa cómo sería tu vida sin eso.
2-      Toma tiempo para agradecer a Dios por lo que tienes, no importa cómo te sientas hoy con eso. El gesto de agradecimiento te hará amar lo que Dios te dio.
3-      Piensa en razones de por qué Dios  no te da ciertas cosas. Quizás te está librando de algo.
4-      Usa lo que tienes, a pesar de que es lo mejor en el mercado y tecnología, aprovecha las ventajas de lo que sí es. Úsalo.
Quita de tu vocabulario la queja, sólo te traerá tristeza.

lunes, 9 de noviembre de 2015

La limonada

Una frase dice: “si te tiran limones, aprende a hacer limonadas”. Muchos de nosotros sufrimos la crítica y la burla por lo que hacemos. Pero mi papá me decía siempre: “al burro que más tira, más se le pega”, o “al árbol que no da frutos nadie le tira piedras”.

Todos luchamos con la crítica y es obvio a algunos le afecta más que a otros, pero de todos modos sigue siendo un problema y me atrevo a decir que hasta social. Hoy en día es común el término Bullying y hay chicos que se quitan la vida porque no soportan el menosprecio de los demás.

Quiero que pienses en la contraparte de la crítica, la insatisfacción o frustración de no ser capaz de hacer lo mismo y la reacción de un corazón rencoroso y enojado es arremeter lastimando al individuo. Cuando alguien emite este tipo de crítica es en realidad un deseo de desanimar y herir a la persona, no hace acotaciones o reparos al trabajo sino que intenta afectar a tu corazón. No quiero ser fanático religioso, pero pienso que es un pensamiento o acción muy satánico, porque Santanas intenta siempre herir el corazón de las personas, su mayor éxito en una persona no es matarlo, pero sí hacerlo infeliz; él sabe cómo hacerlo.

Considera lo siguiente:
1Tesalonisenses 5:9-11  Porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo, quien murió por nosotros para que ya sea que velemos, o que durmamos, vivamos juntamente con él. 
Por lo cual, animaos unos a otros, y edificaos unos a otros, así como lo hacéis.

1-      Dios no nos puso para ser presa de la ira, ni para producir ira, ni para sufrir las consecuencias de la ira. Aquí el término se refiere a la ira de Dios castigando al pecado.
2-      Siendo que Cristo murió por nuestros pecados debemos vivir de un modo que se ajuste a su plan.
3-      Debemos animarnos y contribuir a que la vida de los demás sea de éxito.

No te dejes llevar por la crítica y un pedido personal, no seas instrumento del Diablo siendo quien critica y desanima al resto. Eres mucho mejor que eso. Dios te guie. 

sábado, 7 de noviembre de 2015

La calle de los olvidados


Todos hemos transitado por la calle de los olvidados. La peor de las sensaciones en la vida es sentir el olvido de los demás, es el miedo de los niños que esperan que los busquen a la salida del colegio, el miedo de la enamorada que ve el reloj y su novio no llega. El sentirse olvidado produce una sensación de abandono, desplazamiento y soledad. 

Lo más triste es que a veces se olvidan de los que más sirven o ayudan, y cuando no están se dan cuenta de que hay un vacío y comienza la búsqueda desesperada de bocanadas de aire, para ver quién puede suplir esa ausencia sin darse cuenta, a veces, qué o quién en realidad falta.

Gén 40:23  Y el jefe de los coperos no se acordó de José, sino que le olvidó.

No te sientas mal, o mejor dicho,  recupérate pronto de la decepción si ves que se han olvidado de ti o de tu esfuerzo o trabajo, Dios no se olvida, es su promesa. Las personas caemos en esto de no saber reconocer la entrega de los demás y no nos percatamos del profundo dolor que causamos a los que nos sirven o ayudan. No estoy justificando este hecho, sino que no debería sorprenderte tanto; quizás tú mismo lo has hecho. 

Cuando sientas que te han olvidado, haz notar que tú sigues ahí, con buena actitud y disponibilidad para volver a retomar la relación. La apertura a dejar atrás cualquier diferencia habla mucho de tu carácter y madurez; lo cual, muchos de los que no valoran todo lo que has hecho no lo tienen; pero no se lo digas, sólo muéstrate abierto a recomenzar. 

Por otro lado no te olvides de aquellos que te sirven o ayudan, los que a pesar del tiempo siguen a tu lado, no creas que están allí porque no tienen nada más interesante que hacer en la vida, en realidad están ahí porque perseveran y te aman. No te olvides de ellos y no sufras si lo hicieron contigo; Dios no lo ha hecho y sabe cómo llenar tu vida. No te creas la mentira de que no vales nada, eres más de lo aún tú mismo puedes notar.

viernes, 6 de noviembre de 2015

¿Por qué están a tu lado?

Amistades por conveniencia, es lo que todos detestamos, que alguien sólo nos busque por obtener algo de nosotros. Puede ser por dinero, posición o amistades, tal vez te busca porque eres amigo o hermano de la chica más linda del barrio o de la escuela; porque tienes buenas calificaciones o sabes mucho de matemáticas, no sé hay muchas variantes. Pero es interesante que la razón maliciosa de Labán tenía un fundamento bueno: “Dios”.
Génesis 30:27  Y Labán le respondió: Halle yo ahora gracia en tus ojos, y quédate; he experimentado que Jehová me ha bendecido por tu causa.


Te imaginas que tu jefe te diga: “no me conviene despedirte porque Dios me bendice por tu causa”. Si no lo sabias, somos portadores de bendición porque somos contenedores del Espíritu de Dios. Somos portadores de Luz, somos hijos de Dios. La gente debe desear estar a nuestro lado por esa razón, debe sentir gran aprecio por nosotros porque Dios salpicará su gracia a ellos cuando nos bendice a nosotros. 

Lo triste es que algunos damos tan mal testimonio que los demás desacreditan la efectividad de la vida cristiana. A veces somos más de tropiezo que de bendición; murmuramos, nos quejamos, hacemos las cosas a medias, vivimos por debajo del promedio y somos mediocres; no queremos estudiar y somos perezosos; desobedecemos a nuestros padres, mentimos y somos deshonestos aún en cosas sin sentido. 

¿Podemos hacer algo al respecto?, siempre hay algo qué hacer, obviamente podemos cambiar nuestro testimonio y ser de bendición a muchos. ¿Cómo?, viniendo cada día a Dios. Llénate cada día de la gloria de Dios para ser de bendición a los demás. Encuéntrate con Dios hoy. 

jueves, 27 de agosto de 2015

Pacto... ¿será?

¿Es demasiado tarde para hacer un pacto?. Muchos no quieren asumir compromisos con Dios porque piensan que han perdido el tiempo o que ya se les fue de las manos. Pero acaso ¿no es Dios dueño del tiempo?, si Dios pudo detener el sol y retroceder unos minutos un reloj, ¿no podrá darte también más tiempo para que puedas cumplir tu pacto y recibir su bendición, que tengas un poco más de tiempo en tu haber para conocerle y que puedas experimentar el placer de caminar con Él?.

Aveces pensamos que todo depende de nosotros, de nuestras fuerzas, vigor o dinero; creemos que si estamos bien podremos servir a Dios. Recuerdo cuando visité a mi hermano Feliciano en el hospital unos días antes de su muerte. El cáncer en sus intestinos ya había avanzado lo suficiente para que lo médicos dijeran que no había nada más que hacer. En esa mañana de octubre que estuve en la habitación con Feliciano, vino el doctor y comenzó a decirle que si estaba preparado para su desenlace, le dijo: "te recomiendo que llames a todos los de tu familia y te tomes esta semana para despedirte, porque el esto es inevitable.". La respuesta de mi hermano fue: "todos vamos a morir algún día, pero Dios dice cómo a cada uno, así que no le tengo miedo a la muerte".
El doctor agregó: "es bueno que tengas esa fortaleza de ánimo". A lo que respondió Feliciano: "yo no tengo fuerzas, pero tengo en mi corazón la semilla del evangelio, Dios me da la fuerza".
Nunca olvidaré esas palabras. Un hombre que por años rehusó asistir a una iglesia porque le molestaba el legalismo de algunos; pero que en su último año decidió vivir para Dios, ahora estaba testificando del evangelio de Cristo. ¿era tarde para hacer un pacto?, quizás pienses que sí, seis días después, mi querido Fely se fue a la gloria con Dios. pero como dice el libro de Hebreos: "Dios dio testimonio de que agradaba a Dios". 
He pasado por un seminario teológico, he servido por años en una iglesia local, he trabajado en varias organizaciones cristianas y he estado en campañas evangelísticas miles de veces, pero jamás he escuchado el evangelio de una forma tan clara y concisa. Ningún libro de entrenamiento me dio una visión tan clara de como testificar. Aún hoy me pregunto ¿cómo usó Dios esas palabras en el corazón de ese médico?. Algún día lo sabré.

Génesis 17:24  
Era Abraham de edad de noventa y nueve años cuando circuncidó la carne de su prepucio.


Abraham, el padre de la fe, tenía noventa y nueve años y confiaba en Dios, no dudó en hacer su parte, porque sabía que Dios lo iba a bendecir. No hay nada que temer si es que la contraparte de este pacto es Dios. Porque aunque te quede sólo un día, sería bueno que lo hagas, Dios hará el resto. Que no te importe cuánto tiempo tengas, si los años ya te están pasando facturas. Recuerda, no depende de ti, Dios es quien hace su obra en aquellos que ya no tienen ninguna. No te pierdas la oportunidad de estar hoy con Dios y date cuenta que aún tienes tiempo. Busca a Dios hoy.

miércoles, 19 de agosto de 2015

Bajarte del barco

Génesis 8:15  Entonces habló Dios a Noé, diciendo:
8:16  Sal del arca tú, y tu mujer, y tus hijos, y las mujeres de tus hijos contigo.

Este es un pasaje que habló grandemente a mi corazón. No sé si puedes ver las dos grandes verdades entre líneas, no están ocultas sino que solamente están ahí insinuándose para aquellos que realmente tienen sed de Dios y necesitan su verdad para vivir otro día más en este mundo agobiante y agotador.

Mientras escribo esto se me aparece otra verdad que la compartiré al final; pero la primera es: “Dios sacó a Noé del arca”. A veces atravesamos por diferentes tormentas, algunas duran días y otras años; pero me llena de consuelo y esperanza el hecho de que Dios nunca pierde el control, Él está sobre todo y en control de todo y cuando es el momento justo te saca del arca, Él te guardó ahí para protegerte, quizás sentiste miedo a los truenos, al movimiento, al crujir de la madera, pero Dios te mantuvo a salvo ahí dentro; el arca es una figura de Cristo y dice la Biblia que estamos guardados en Él. Nada de lo verdaderamente importante de Noé se perdió, quizá perdió sus plantaciones o su casa, pero no a su familia, que al final de cuentas es lo más importante que todos tenemos.

La segunda verdad es: “Dios no te deja en el arca, te dice que salgas”. Dios no te deja en medio de las pruebas, tiene un plan para cuando la prueba acabe, simplemente utiliza la prueba para moldearte y sacar lo mejor de ti. Dios no quiere que te acomodes al arca, tampoco a tu situación actual, no digas: “bueno, esto es lo que me toca vivir”, Dios quiere que salgas y veas lo nuevo que tiene para ti. Así que sal de ahí porque Dios tiene un mundo nuevo y un plan nuevo para tu vida.


Por último, al comenzar a escribir esto me di cuenta de cómo comienza este pasaje: “entonces habló Dios…” dos cosas más:
- Primero, “entonces” Dios siempre tiene un momento justo para actuar, no es el tuyo ni el mío, es el que Él sabe que es el más conveniente; piensa en la situación de Noé, si salía antes se hubiese mojado hasta el cuello; y si se demoraba quizá ya no tendría comida dentro del arca y ¿cómo le explicaba eso al león que estaba dos cuartos más allá del suyo?, definitivamente Dios tiene un momento justo para sacarte de la prueba, sólo debes esperar. 
- Y segundo, y ahora sí, ya último: “Dios habló a Noé” ¿Dios habla a tu vida?, ¿puedes escucharlo? ¿estás atento al cielo para ver si te habla?. Quizás estás tan preocupado por tu prueba o tan acomodado a tu situación, tu vida, que has perdido la capacidad de escuchar a Dios. Déjame decirte que Dios siempre habla, nada pasa, ni una hoja cae al suelo si Él no lo permite. Cuando Dios habla, las cosas suceden. Así que no trates de salirte del arca hasta que Dios te hable, hasta que Él te diga: “ven, sal fuera”. 
¿ya te encontraste con Dios hoy?. Perdón por irme hoy un poco más de un minuto, pero Dios quería hoy un rato más conmigo y contigo. No te vayas de su presencia.